viernes, 25 de agosto de 2017

Dulce Carolina

Una comedia muy divertida, colmada de misterio



El disparate y el desconcierto son destacables condimentos en esta historia construida por Leonardo Azamor. Fresca, contemporánea y ocurrente, es una trama que sorprende al público en todo momento. El autor, director y autor junto en dirección a Luciano Villa han sabido sacar el jugo del genial trió actoral. Administrar con  entendimiento el espacio y la dinámica.

Una joven pareja, con ansias de ser padres,  se aventura en un destino incierto al socorrer a su nuevo vecino. Quien ágilmente empatiza con ellos, gana su confianza y los lleva a un tornadizo juego.

Natalia Santiago, acertada como la joven con carácter fuerte pero escondidas inseguridades, muta frente al público y se involucra con delirio en el juego del recién llegado. Leonardo Azamor, desopilante y muy expresivo, aporta los momentos de mayor comicidad. Y Martin Henderson como el superficial marido, actor de profesión, exteriorizando sentimientos y broncas, entre anécdotas de trabajo.

Mínima escenografía, muy bien utilizada, una alfombra de color arena se extiende hasta el techo, forma una pared, que divide el ambiente. Más un sillón que gira el propio elenco en rápidos transiciones y paralas mutaciones de las situaciones.
El espectador es atrapado en la historia desde su inicio sin distracción, tratando de descubrir el misterio reinante desde la mitad de la pieza, disfrutando del humor ácido y  cuestionándosesin querer que vio hasta el final.




Autoría: Leonardo Azamor
Actúan: Leonardo Azamor, Martín Henderson, Natalia Santiago
Vestuario: Lidia Navarro
Diseño de escenografía: Carlos López Cifani
Dirección: Leonardo Azamor, Luciano Villa
NÜN TEATRO BAR. Juan Ramírez de Velasco 419 (CABA)

Funciones: Sábado - 21:00 hs - Hasta el 26/09/2017


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